jueves, 24 de marzo de 2011

Agradecimientos a Bartolomé


Hoy, en un jueves del Aleph, voy a combinar las dos cosas que suelo publicar en esta columna. La primera (y más abundante) son las múltiples interpretaciones de algo. La segunda (y menos frecuente) consiste en compartirles esas pequeñas joyas que me voy encontrando en el mundo literario.

Hoy lo que les quiero compartir es el primer párrafo del primer relato del libro "Historia Universal de la Infamia" del siempre bien ponderado Jorge Luis Borges (ya saben, el culpable del nombre de esta columna). Es solo un párrafo, no muy largo pero si muy diciente. Y lo que encontrarán posterior a este párrafo es una corta lista de algunas cosas que le debemos a Fray Bartolomé de las Casas (tenía que ser un Fraile).

A continuación, el relato:

En 1517 el P. Bartolomé de las Casas tuvo mucha lástima de los indios que se extenuaban en los laboriosos infiernos de las minas de oro antillanas, y propuso al emperador Carlos V la importación de negros que se extenuaran en los laboriosos infiernos de las minas de oro antillanas. A esa curiosa variación de un filántropo debemos infinitos hechos: los blues de Handy, el éxito logrado en París por el pintor doctor oriental D. Pedro Figari, la buena prosa cimarrona del también oriental D. Vicente Rossi, el tamaño mitológico de Abraham Lincoln, los quinientos mil muertos de la Guerra de Secesión, los tres mil trescientos millones gastados en pensiones militares, la estatua del imaginario Falucho, la admisión del verbo linchar en la décimotercera edición del Diccionario de la Academia, el impetuoso film Aleluya, la fornida carga a la bayoneta llevada por Soler al frente de sus Pardos y Morenos en el Cerrito, la gracia de la señorita de Tal, el moreno que asesinó Martín Fierro, la deplorable rumba El Manisero, el napoleonismo arrestado y encalabozado de Toussaint Louverture, la cruz y la serpiente en Haití, la sangre de las cabras degolladas por el machete del papaloi, la habanera madre del tango, el candombe.


Entre otros hechos (de esos infinitos que nombra) podríamos agradecer:

- El Currulao y sus variantes como el Bambuco Viejo o el Patacoré, también adaptaciones como el Bundé tomado de los indígenas y alimentado con el alma negra y brillante de los afrodescendientes.

- Por supuesto, y como corolario del anterior, podemos agradecer la deliciosa marimba de chonta, y las transportadas que esta nos pega en el Petronio Álvarez.

- La existencia de personalidades tan geniales como la de Edson Arantes do Nascimentocomo (mejor conocido como Pele), o tan amargas como la del Negro Acacio.

- La existencia del color "Negro hijueputa" que usó juanito en su chiste.

- La tristeza que nos deja La Negra Tomasa cuando se va de casa, o la camisa endiablada que quiere saltar del Negro José.

- El hecho de que ahora esté disfrutando de aprender armónica

- También tendría que agradecer algunas risas que me he llevado al escuchar frases como “blanca que no ha comido negro no conoce el paraíso”, o “el que come negra no le da gripa en 7 años”.

- La moda afro de los 70

- Igualmente agracederle por alguno de los mejores cuenteros que conozco.

En fin, podría seguir y seguir, pero dije que sería una lista corta, para que más bien cada uno aporte a la lista las cosas que tendríamos que agradecerle (o no) a Bartolomé. ¿Quién se anima?

6 comentarios:

Andrea dijo...

ufff la deliciosa comida preparada por las manos de las negras del Pacífico... se me hace agua la boca...

Ianck dijo...

andrea se me robo el comentario

igual lo hare

el delicioso seviche de piangua con cebolla y limón

el parguito rojo en leche de coco

el seviche de camarón con plátano verde

ni las shaquiras en el cabello cuando se va a cualquier playa colombiana

kxi dijo...

El hecho de tener "primos" en todo lado!

kxi dijo...

Que el fútbol se pueda bailar y que en el baile se pueda anotar! :P

Mauro Z dijo...

ufff, comida del pacífico, que delicia.

Y J, que buenos aportes los dos, especialmente el último.

También podríamos decir que gracias a Bartolomé es que tenemos las columnas de cine y de instrucciones de este manual :P

Haga dijo...

... El golpe de un tambor para librarme de las penas, mientras bailo o viendo contonearse a una mujer divina!!... Curarme con rumba!!... Y por supuesto el sabor que corre por mi sangre!!!