martes, 16 de octubre de 2007

Instrucciones para comerse un burrito


El sábado pasado estuve en la casa de un amigo reunido con un grupo de amigos de la U a los que es más difícil de reunir que a la guerrilla con el gobierno de mi país. Hago una comparación de corte político precisamente porque en la conversación que tuvimos el sábado, uno de ellos ha cambiado bastante su discurso desde que vive en Bogotá. Y me agrada hacer alusión a los personajes que me acompañaron.

El grupo es bastante peculiar. La mayoría de ellos, o de nosotros, somos personas muy ocupadas. Amantes del trabajo, el estudio y el conocimiento. Somos personas sensatas, claras, amables y en general buenas. Pero no nos perdonamos ningún error, y es un pasatiempo ver cuando uno de nosotros se equivoca para caerle en manada como rapaces cuervos. Debo confesar que tal vez adquirieron ese comportamiento de mí. Y debo confesar también, que tal vez sólo en un par de círculos sociales me siento en libertad de comportarme de esa forma. En esta ocasión, yo caí con todo el peso que podría caer, al no saber como comerme un burrito. Cosa que para muchos debería ser algo de sentido común. Así que en honor al aprendizaje adquirido y a la cantidad de inclementes burlas que recibí, desplacé las instrucciones que tenía previstas para esta semana por las siguientes:

  1. Encuentre un espacio en su agenda donde además tenga un espacio físico disponible para ofrecer. Puede ser su casa sin padres (a menos que piense invitarlos), su apartamento o casa de soltero, o la de otro amigo que se ofrezca. En fin en un lugar donde haya comodidad y se pueda ensuciar con tranquilidad.

  1. Invite a un grupo de amigos a asistir y proponga un tema para la tarde, o la noche (depende del horario en que crea que haya menos probabilidad de deserción).

  1. Si usted es una persona amplia y pudiente, y el conjunto de amigos que invitó no es muy grande, compre los ingredientes de su bolsillo. Sino, cobre una cuota moderada. Ojo, esto puede reducir notablemente la convocatoria si sus amigos son como usted, que se atrevió a cobrar. El conjunto de ingredientes puede variar, pero usted no es un experto, apéguese a lo básico. Claro, también puede improvisar con ingredientes insospechados, que le darán un toque de popularidad, pero que como toda improvisación pueden tener efectos negativos. Trate de leer la aceptación al cambio que tengan sus amigos.

Los ingredientes son, tortillas de pan. Las Bimbo son muy buenas y traen unas instrucciones muy completas en el empaque, que sería bueno que dejara a la vista para que no les pase a sus amigos cosas tan divertidas, como la que me pasó a mí. Aunque creo que es más divertido burlarse de ellos cuando les pase. Fríjoles con chile. Puede prepararlos, pero para qué complicarse si ya el mercado ofrece una gama amplia de enlatados que traen la carne molida incluida, picante y no picante. Tomate picado, o si usted es más avanzado y no es extraño para sus amigos que corte un tomate, pico de gallo (ese picadillo mejicano tan delicioso). Maizitos tiernos. Le puedo explicar cómo escogerlos, cocinarlos, desgranarlos, etc. en otras instrucciones, pero mejor cómprelos enlatados como los fríjoles (así ya son muy ricos). Queso rayado, ojalá mozarella. Para esto puede conseguir un amigo que trabaje en una empresa como Alpina y decirle que los traiga directamente desde Bogotá para esa noche. Lechuga batavia cortada en finamente. Cerveza o gaseosa para pasar.



  1. Genere el ambiente de charla propicio y ofrezca muchos pasabocas previos para que la gente no se coma los burritos con mucha desesperación.


  1. Sirva los ingredientes en la mesa en pequeños moldes e invite a pasar.








  1. Siempre la gente, siguiendo absurdas normas de conducta, aunque se muera por servirse, dará muchos rodeos. Se parará lentamente, irá al baño, mirará por la ventana, esperará que el primer incauto se sirva. El anfitrión, es usted debe esperar hasta el final, si es que quiere seguir las normas de sus invitados. Finalmente alguien como yo, irá de primero. No porque tenga más hambre, sino porque no le gustan los rodeos, por lo menos no cuando no está escribiendo.

  1. Ahora observe como el primer incauto se sirve. No lo corrija, déjelo equivocarse. Eso le dará pie para hacer un fino chiste y para que los demás no sean tan torpes como lo fui yo. Cuando esa persona (que encarné el sábado) acabe de rebosar su tortilla con fríjol, maíz, tomate, lechuga y mucho queso (arruinando cada uno de los ingredientes para otra preparación con gusto diferente a la de él mismo), pregúntele: “Ve, cómo diablos vas a cerrar tu burrito?”. Al parecer esa noche me transporté a la escena de una preparación de tacos previa y no tomé en la cuenta que la blanda tortilla del burrito no se sostendría mientras la levantaba para llevarla a mi boca.




  1. Mientras la dignidad del invitado le impida aceptar un tenedor para sacar el contenido de su tortilla y armar el burrito (no le permita desperdiciar tan “bella” preparación y por favor, no le permita desperdiciar tan deliciosa comida), tómele fotos. Mientras el pobre objeto de burla del público intenta llevar semejante armatoste endeble a su boca, tómele más fotos. Sevirán para luego escribir unas correctas instrucciones.





  1. Cuando el orgullo de su invitado esté lo suficientemente golpeado enséñele cómo se prepara un burrito dándole la oportunidad de hacerlo de nuevo:

Tome la tortilla. Sirva una línea relativamente gruesa de fríjoles partiendo desde la cuarta parte de la tortilla hasta el borde, pero dejando suficiente espacio a los costados para cerrarlo. Sobre la misma línea sirva el tomate. Estos dos ingredientes primero porque son más húmedos. Esto dará la oportunidad a la tortilla de absorber la humedad y de disminuir la probabilidad de chorrearse al comer con el contenido del burrito. Luego sirva los demás ingredientes sobre la misma línea a su gusto, teniendo en cuenta siempre que el burrito debe poder cerrarse. Ahora doble la parte inferior de la tortilla primero (para que quede más seguro) sobre el contenido y después los costados sobre el primer doblez. Su burrito quedará como un paquete seguro que podrá sostener con su dedo mientras lo muerde. Si usted le preparó el burrito a otra persona puede sostenerlo con un palillo adornado con dos cubos de queso mientras se lo entrega.

  1. Relájese y disfrute de un gran plato. Y, si no comió tantos pasabocas, ni abarrotó su tortilla con gran cantidad de relleno, como su invitado, puede darse el gusto de repetir discretamente.

kxi


9 comentarios:

Anónimo dijo...

Definitivamente el problema de forma parece simplemente un descuido por parte del comensal, pero de fondo creo que el hambre puede hacer cometer errores de este tipo.
Una sugerencia adicional podría ser, no apresurarse, tomar aire y fijarse muy bien en que tipo de plato es el que se esta sirviendo para no incurrir en errores de símil tipo "burro-taco", segundo usar el sentido común, y mas cuando se es INGENIERO, por ultimo retirarse a un sitio aislado a comer en caso que se tenga dudas sobre la menera en que se sirvió el plato.

Por favor control al Homero que todos llevamos dentro.

kxi dijo...

Yo no podría asegurar que el caso fuera de hambre. Ya había comido muchos maizitos y toscacos con queso. El problema fue de descuido. ¿Quién sabe en dónde estaba mi cabeza mientras yo servía relleno sobre la tortilla?

Anónimo dijo...

Usar el sentido común es importante, pero también es importante aprender a reírse de uno mismo; sobre todo cuando se acostumbra tanto reírse de los demás...jejeje (la práctica hace al maestro, y la risa camufla la derrota). De todas formas, se reconoce que el objetivo se cumplió: al final, pudiste armar el Burrito... otro hubiera terminado de comerse la tortilla y el relleno cual Omelet Kuty.

Podríamos complementar el ensayo con una pequeña sustentación que todos terminan preguntándose: Por qué le llaman Burrito???

gl hf.

kxi dijo...

Historia del burrito [editar]

En los tiempos de la revolución mexicana (1910 - 1921), en el barrio de Bella Vista, en Ciudad Juárez, Chihuahua, México, había un señor llamado Juan Méndez que tenía un puesto de comida. Para que no se le enfriara la comida, tuvo la idea de hacer tortillas de trigo grandes y colocar los rellenos dentro enrollando las tortillas y colocándolas dentro de mantelitos para mantenerlas calientes. Eran tantos los pedidos que recibía, que decidió comprar un burro para transportar la comida y cruzarla por el Río Bravo. Fue tan grande el éxito de su sabrosa comida que con el tiempo comenzaron a llegar mexicanos y estadounidenses de todas partes preguntando por la comida del "burrito". Fue así que nació el burrito.

A pesar de esto ya es una tradición en el norte donde mas se come el tradicional platillo de origen indígena llamado machaca, doblar las tortillas de trigo en forma de burrito desde hace siglos asandolas en comales de hierro con un poco de manteca o mantequilla.

Fuente: http://es.wikipedia.org/wiki/Burrito_%28comida%29#Historia_del_burrito

Mauro Z dijo...

Definitivamente Wikipedia da para todo.

Pero bueno, algo mas aprendiste en tu vida, como buen informático debes meter en el inicio de tu algoritmo, analizar la capacidad del material a doblar :P

Anónimo dijo...

Pues bueno...aprovecho para felicitar a kxi por su intento de prevenir de el ridículo en reuniones o sitios públicos con un parcialmente completo manual de instrucciones acerca de cómo comer un burrito, pero a su favor puedo dar fé (dados casi que 20 años de conocernos)que el ingeniero es un hombre que, medianamente, sabe manejar una comida como esta. Recuerdo particularmente el grado sorpresa de nuestro gran amigo Andrés en donde se sirvió de "plato fuerte" dicha comida. Por tanto agrego que si hizo el rídiculo fue porque depronto se sirvió más de lo que debía o qué se yo, pero lo que si puedo afirmar es que el muchachón si conoce el arte de comer un burrito, asi que espero que la próxima vez recordá que sos todo un experto en el tema.
Y como te dije..espero el manual de cinco pasos pa´destruirle la reputación a alguien... Besitos.

Anónimo dijo...

la verdad yo estoi muy seguro de que su articulo es muy bueno

Anónimo dijo...

que buenos culos guey

kxi dijo...

Ah nunca le contesté al último anónimo. Es una pena, porque no debe estar esperando la respuesta, y por lo tanto no creo que de respuesta esta pregunta: ¿A qué te refieres exactamente con la expresión que buenos culos guey? Porque en Colombia puede entenderse de una forma que tal vez en el contexto no cuadre. Al menos yo no veo culos en las fotos.