No Sólo Para Tus Ojos: Top 5 de los temas introductorios de James Bond 007

El pasado jueves 18 de septiembre se hizo público oficialmente el nuevo tema de la vigésimo segunda entrega de la saga James Bond 007, próxima a ser estrenada en cines. Su título es Another Way To Die, y es interpretado a dúo entre Alicia Keys y Jack White, vocalista del grupo White Stripes. En éste se puede notar fuertemente la influencia de cada uno de los dos artistas, tanto en lo vocal y en lo rítmico, como en lo instrumental, logrando que ya se encuentre entre los incisivos de los hambrientos críticos alrededor del mundo.

A casi medio siglo del inicio de una de las sagas más exitosas y siempre esperadas del cine, nuestro famoso agente todavía tiene licencia para reinventarse con respecto a su caracterización y a su contexto argumental, así como a la música que da compás a sus aventuras y la cual, aunque propende por conservar los acordes clásicos de la banda sonora original, es sincrónica a los géneros y estilos musicales vigentes.

A continuación les comparto un compilado breve de los temas que, a mi parecer, persisten en el recuerdo de los fanáticos por su contenido visual, armónico y lírico:

5. Título: You Know My Name
Intérprete: Chris Cornell
Año: 2006

Chris Cornell - You Know My Name
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Los Broccoli han decidido hacer reencarnar a su prolijo vástago, estando éste aún vivo. Un nuevo comienzo para la serie; una nueva manera de presentarla. Este es el primer tema introductorio que innova al no coincidir su nombre con el de su película correspondiente (Casino Royale). Ya que hasta un vocalista de Grunge tiene derecho a ser redimido, el ex – líder de Soundgarden logra con su voz rasposa y decidida darle la energía necesaria, con un viso depresivo apenas indicado, a esta versión infatigable, irreverente y despeinada de James Bond, que aún no me acaba de cuadrar, pero intuyo que va por buen camino.

4. Título: Tomorrow Never Dies
Intérprete: Sheryl Crow
Año: 1997


El dulce y amargo sabor de los diamantes, el plomo y el enebro servidos en una misma copa. Esta balada combina de manera precisa los arpegios de la guitarra tradicional con esta voz sensual y antojadora, que se desliza delicadamente como la seda sobre las imágenes curvilíneas del vídeo. Son los encantos de James Bond plasmados sobre la partitura de un piano. Sencillamente romántica.

3. Título: The Living Daylights
Intérprete: A-ha
Año: 1987

THE LIVING DAYLIGHTS VIDEO A-HA
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No es la mejor canción; mucho menos la mejor película, pero tal vez sea mi tema favorito del listado. La embrujadora voz nórdica de los integrantes de esta banda conduce al espectador a la cima de una alta montaña nevada, para luego dejarlo descender por la deliciosa pendiente de su coro, mientras zumban como disparos a su alrededor, los acordes electrónicos y de saxofón, netamente ochenteros. Considero que tiene los mejores ocho segundos iniciales, elegantes y exóticos al tiempo, así como los mejores ocho segundos finales, donde su fade out nos deja una certera oración acerca de cómo vivir nuestros días: "Set your hopes up way too high... Living's in the way we die..."

2. Título: The World Is Not Enough
Intérprete: Garbage
Año: 1999


Sólo por esta canción, Garbage le está debiendo a su público urgentemente un concierto sinfónico. Mientras las cuerdas de violín erizan los vellos y poros de tu espalda, y el bajo golpea con fuerza tu corazón, contemplas como la erótica Shirley Manson, en un acto de ilusionismo, te susurra al oído que está segura, que está a salvo, mientras sus labios encendidos están posados sobre los de sí misma. No me interesa saber su truco; sólo disfrutarlo. Definitivamente, el mejor tema de las últimas entregas de la saga.

1. Título: Live And Let Die
Intérprete: Wings
Año: 1973


Este tema sólo necesita de su título ambientado por sus tres ritmos distinguibles, para resumir el sentido existencial de su personaje: vivir y dejar morir. El acento británico pronunciado por Paul McCartney transforma una lírica sencilla en una declaración de vida, en un juramento a cumplir bajo cualquier riesgo. En este mundo cambiante, James Bond seguirá siendo interpretado por muchos actores, y muchos otros intentarán imitarlo, pero el ser concebido alguna vez por Ian Fleming permanecerá evolucionando sin perder su esencia, sin dejar de hacer su trabajo: hacer de su vida un paraíso y, de la de sus enemigos, un infierno. Live and let die.